Servicio de Urgencias 112

Servicio de Urgencias 112

El pasado día 15/05/08 y cuando estábamos reunidos familiarmente en compañía de un relajante café, nos sobrevino lo que uno nunca quisiera que ello ocurriera.Mi sobrina, que no había cumplido los tres añitos, se nos desvanecía ante nuestra atónita presencia. La angustia, el desasosiego, la impotencia etc., cundió nuestros cuerpos. Atenazados por los nervios, solicitamos la presencia de una ambulancia medicalizada a través de llamada al servicio de urgencias 112, el cual, una vez recibida la llamada por el operador, la desvía a una segunda persona, supongo que sanitario por las preguntas que hacían al respecto. En ello transcurren unos minutos cruciales, tal vez vitales en algunos casos. Que ante tal desesperación, trasladamos a la niña a Hospital Infanta Cristina por un buen hombre que ofreció su vehículo para ello debido a la proximidad en la que nos encontrábamos. Que cuando mi sobrina se estaba debatiéndose entre la vida y la muerte desgraciadamente, recibimos una llamada telefónica a través del móvil del cual habíamos solicitado la asistencia de la ambulancia medicalizada, donde su interlocutor hacía referencia de, el porqué no habíamos anulado el servicio, todo ello de forma tosca, con toda la frialdad del mundo y con una falta de sensibilidad inhumana, pues mi hermano, a pesar de lo que estaba sufriendo tuvo la educación de pedir disculpas al operador. Pero por favor, como se puede ser tan frívolo, inhumano, sin saber lo que pueden estar padeciendo y sufriendo las familias que solicitan el susodicho servicio (la próxima vez me lo pensaré). Deberían tomar nota de la calidad profesional y humana del Doctor Figueroa (cardiólogo) y a todo su equipo, los cuales, a pesar de realizar un esfuerzo sobrehumano, no pudieron evitar la pérdida de mi sobrina. Gracias doctor.